sábado, 11 de agosto de 2007



con el tiempo aprendo
la sutil diferencia entre
tomar una mano y encadenar un alma;
aprendo que amar no es apoyarse en alguien
y compañia no siempre significa seguridad.
y empiezo a aprender
que los besos no son contratos
ni los regalos, promesas,
y empiezo a aceptar mis derrotas
con la frente alta y la mirada al frente,
con la gracia de una mujer,
no con el dolor de una niña.
y aprendo a construir todos mis caminos en el presente,
porque el terreno del mañana es
demasiado incierto para hacer planes
y los futuros tienden a caerse
en mitad del vuelo.

con el tiempo aprendo
que hasta la luz del sol quema
si te expones demasiado a ella.
entonces siembras tu propio jardin
y decoro mi alma
en lugar de esperar
que alguien me traiga flores.
y aprendo que en realidad
puedo resistir,
que soy fuerte de verdad,
que valgo de verdad,
y aprendo,
y aprendes...
con cada adios aprendes.