tengo fiebre de verte.
Recuerdas en Montejo aquel parque al que fuimos y te esforzabas en escucharme y yo en comprenderte.
Aquel beso frente a la galería del teatro...
Estaré yendo al atardecer varios días seguidos con la esperanza de encontrarte de nuevo, abrazarte y quitarnos juntos al anochecer para hacer una nueva historia juntos.
tuya c.